viernes, 30 de septiembre de 2011

Un estudio relaciona el consumo de cerveza por mujeres con la psoriasis.

Agosto 2010.

Las mujeres que beben cinco o más cervezas a la semana tienen un riesgo 2,3 veces superior de desarrollar psoriasis, según ha determinado un estudio de Harvard Medical School y publicado en 'JAMA'.

   La asociación entre el consumo de alcohol y el riesgo de psoriasis es algo que se veia sospechando desde hace tiempo, ha afirmado el autor del estudio, el doctor Abrar a. Quresi. Así, ha indicado que las personas que tienen esta enfermedad de la piel beben más alcohol que las que no la sufren y además seguir bebiendo puede agravar la severidad de la psoriasis.

   En otras enfermedades se ha demostrado que el tipo de alcohol que se consuma influyen en el riesgo, por ejemplo la cerveza provoca más riesgo de gota que el vino. Por ello, el equipo dirigido del doctor ha querido evaluar la asociación de diferentes tipos de alcohol en esta enfermedad.

   Para ello, han analizado los datos de más de 82.000 mujeres de entre 27 y 44 años en 1991. Las mujeres indicaban la cantidad y el tipo de alcohol consumido cada dos años, así como si recibían un diagnóstico de psoriasis. En 2005, se habían desarrollado 1.150 casos de psoriasis, de los que se usaron 1.069 para el análisis.

   En comparación con las mujeres que no beben alcohol, las que afirmaban tomar una media de 2,3 bebidas a la semana tenían un riesgo de un 72 por ciento más de sufrir psoriasis. Al analizar la muestra según el tipo de bebida, el equipo encontró que las que tomaban cinco o más cervezas -- excluyendo las de tipo 'light'-- tenían un riesgo 1,8 veces superior de desarrollar la enfermedad. En cambio, no encontraron relación entre la psoriasis y las cervezas light, el vino tinto y blanco ni con licores.

   "Esta es la única bebida alcohólica que ha mostrado que puede incrementar el riesgo de psoriasis, lo que sugiere que sean algunos componentes no alcohólicos, que no se encuentran en el vino o en el licor, los que juegan un papel importante en esta asociación", ha explicado Quresi.  

    El experto ha señalado que la cebada y otro tipo de almidones contienen gluten, al que algunos individuos con psoriasis han mostrado mayor sensibilidad. Para la cerveza 'light' se utiliza menos cebada, lo que podría explicar por qué no se ha encontrado relación con este tipo de cerveza.

Artículo extraido de: europapress.es/salud/noticia-mujeres-beben-cerveza-padecen-mas-psoriasis-20100817111321.html

martes, 27 de septiembre de 2011

Un estudio relaciona cuatro “locis” (uno en NOS2, uno en FBXL19, uno cerca de PSMA6-NFKBIA, y uno cerca de TRAF3IP2)con la psoriasis.

Octubre 2010.

El descubrimiento puede ayudar en el desarrollo de nuevos tratamientos.

ANN ARBOR, Michigan--- Los científicos del Sistema de Salud de la Universidad de Michigan y sus colaboradores han encontrado cuatro nuevos “puntos calientes” en el ácido desoxirribonucleico que, algún día, ayudarán a orientar nuevos tratamientos para la psoriasis, una de las enfermedades autoinmunes más comunes en Estados Unidos.

Mediante el uso de los métodos más avanzados para observar los fundamentos genéticos ocultos de la enfermedad que incapacita y desfigura la investigación, publicada en la revista Nature Genetics, avanza en la descripción de los territorios hasta ahora desconocidos de la psoriasis y de la artropatía psoriásica.

Las conclusiones podrían conducir a nuevos objetivos para los medicamentos y tratamientos adaptados para la enfermedad de la piel, dijo James T. Elder, Profesor de la Cátedra Kira D. Wuepper de Dermatología Molecular Genétgica e investigador principal en ese estudio que incluyó a investigadores del Departamento de Dermatología y de la Escuela de Salud Pública.

“Éste es un asunto candente en la genética actualmente”, dijo Elder. “Aún cuando uno toma en cuenta todos los genes que se han encontrado en el mundo hasta ahora, sólo representan alrededor del 40 por ciento de la causa genética de la psoriasis. La pregunta entre los genetistas sigue siendo ‘¿Dónde está la materia oscura?´”.

La nueva investigación se apoya en trabajos anteriores del equipo de la UM cuyos descubrimientos han ayudado a develar los factores hereditarios de la enfermedad, y han proporcionado a los científicos una mejor comprensión de la relación de la psoriasis con otras enfermedades autoinmunes, tales como el Mal de Crohn, la artritis reumatoide y el lupus.

Hasta ahora la investigación en todo el mundo ha vinculado 25 genes con la psoriasis, un mal que tiene un fuerte componente hereditario. Incluidos los nuevos descubrimientos el equipo de Elder ha estado involucrado en más de la mitad de esos hallazgos.

Dos de los cuatro nuevos sitios de susceptibilidad están fuertemente relacionados con la atropatía psoriásica, una forma dolorosa y destructiva de la artritis que afecta a aproximadamente uno de cada cuatro pacientes con psoriasis, dijo Elder.

Los aproximadamente 7,5 millones de personas en Estados Unidos con psoriasis tienen, asimismo, un riesgo mayor de morir por problemas cardiovasculares relacionados con la psoriasis.

Una vez que se haya identificado un catálogo completo de los genes relacionados con la psoriasis los científicos esperan generar un “perfil genético de la psoriasis” que pueda predecir el riesgo de que una persona desarrolle el mal, abriendo la senda a tratamientos innovadores. Los tratamientos actuales, que incluyen diferentes tipos de agentes supresores de la inmunidad, no son siempre eficaces y pueden causar graves efectos secundarios, aunque un nuevo compuesto llamado Stelara (ustekinumab), que apunta a uno de los genes que han descubierto, ha brindado a los pacientes un alivio de hasta un mes de duración, dijo Elder.

El profesor de Bioestadísticas de la UM, Goncalo R. Abecasis, desempeñó un papel importante en el diseño del programa de computadora y los métodos estadísticos para el análisis de más de 6 millones de variantes genéticas de más de 4.000 personas.

“Fue una tarea bastante impresionante”, dijo Abecasis. “Observamos con un detalle mucho mayor las variaciones genéticas que son típicas de forma que pudiéramos entender la biología de la psoriasis y así podamos obtener mejores medicamentos”.

Método del trabajo; El estudio internacional, hecho por centros múltiples y encabezado por la UM analizó los datos de dos estudios recientes de asociación de la psoriasis en todo el genoma que involucró a más de 4.300 personas con y sin la enfermedad. Estas conclusiones fueron seguidas por un estudio de replicación en tres etapas que involucró a más de 8.7-n00 personas. Los nuevos “loci” o sitios identificados incluyen uno en NOS2, uno en FBXL19, uno cerca de PSMA6-NFKBIA, y uno cerca de TRAF3IP2. La UM encabezó la investigación que llevó al descubrimiento de tres de los cuatro loci. Se informó del sitio TRAF3IP2l en un segundo artículo que se publica en la misma edición de Nature Genetics, en el cual los colaboradores de Elder de la Universidad de Kiel, en Alemania, tuvieron el papel principal.

viernes, 23 de septiembre de 2011

Vinculan a la Psoriasis con la Enfermedad Periodontal Destructiva.

Febrero 2010.

HR Preus, Department of Periodontology, IKO University of Oslo, POB 1109 Blindern, N0317, Oslo, Noruega.

Los pacientes con psoriasis presentan pérdida de masa ósea significativamente mayor que otros enfermos de igual edad y sexo.

La periodontitis destructiva se considera una enfermedad muy frecuente y se caracteriza por la infección bacteriana asociada con agresión inmunológica de los tejidos que sostienen a las piezas dentarias. Si bien los microorganismos gramnegativos anaerobios parecen los principales patógenos involucrados, los estreptococos beta hemolíticos forman parte de la flora asociada con esta enfermedad.

Por otra parte, la psoriasis es una afección crónica, inflamatoria y multisistémica, con una prevalencia estimada del 2% en la población general. Entre los factores relacionados de la enfermedad se destacan la predisposición genética, las infecciones estreptocócicas y diferentes variables clínicas y psicológicas. Tanto la periodontitis como la psoriasis comparten entre sus mecanismos patogénicos una respuesta inmune exagerada a la presencia de la microflora epitelial. Por lo tanto, la presencia de procesos fisiopatológicos comunes permite suponer una asociación entre estas enfermedades.

Sobre la base de estos conceptos, los autores llevaron a cabo un análisis comparativo en el cual participaron 155 pacientes noruegos con psoriasis y un grupo de control de 155 sujetos con edad y distribución por sexos similares. Se llevaron a cabo radiografías dinámicas durante el proceso de morder, así como un cuestionario acerca del diagnóstico presuntivo o confirmado de periodontitis. Se definieron como criterios de valoración a la masa ósea y a la pérdida de piezas dentales.

La media de edad de la población de estudio se calculó en 51 años, con un 43.2% de varones. De acuerdo con los expertos, se describió en los pacientes psoriásicos una pérdida significativamente mayor de masa ósea y de piezas dentarias (p < 0.001 para ambas comparaciones). Esta diferencia fue independiente de la edad de los enfermos. En otro orden, se identificaron otras comorbilidades en el 25% de los participantes, si bien sólo el 5.5% de estas afecciones se asociaban con enfermedades periodontales. Los investigadores recuerdan que la reducción de la masa ósea reconocida en las radiografías dinámicas durante la mordida se considera un indicador válido de enfermedad periodontal destructiva en todos los grupos etarios. Por otra parte, agregan que la causa más frecuente de remoción de piezas dentarias, con la excepción de los terceros molares, en la población noruega no menor de 45 años es la enfermedad periodontal, en particular en relación con los premolares y molares tanto del maxilar superior como de la mandíbula.

Entre los probables mecanismos subyacentes de esta asociación entre la psoriasis y la enfermedad periodontal se postula la participación de la inmunidad natural, en términos de la respuesta adaptativa mediada por linfocitos T y B. Se ha demostrado una regulación en aumento de los receptores tipo toll en la piel de los pacientes con psoriasis y en el espacio periodontal de los individuos con periodontitis. Esta mayor expresión se vincula con la amplificación de la inflamación con posterior activación de los linfocitos T. De este modo, se especula que, en el contexto de una predisposición genética, diversos componentes de la respuesta inmune innata, como los receptores tipo toll, podrían relacionarse con la patogénesis de ambas enfermedades.

Así, los investigadores concluyen que, si bien la psoriasis y la enfermedad periodontal parecen vincularse con procesos subyacentes similares, los resultados deben interpretarse de modo cauteloso y se requiere de más estudios experimentales para confirmar esta hipótesis de una causalidad común para ambas afecciones.

Artículo extraido de: http://www.siicsalud.com/dato/editorial.php/116919

martes, 20 de septiembre de 2011

Un estudio relaciona la hormona (Leptina), asociada a la obesidad, con la psoriasis.

Diciembre 2008.

Las personas con psoriasis parecen más propensas a tener mayores niveles de leptina, hormona asociada a la obesidad, que aquellas que no padecen este trastorno de la piel, según un estudio del Hospital General de Veteranos Taichung y la Universidad Nacional Chung Hsing en Taiwán. La leptina es producida por las células de la grasa y se cree que podría contribuir a la obesidad en otras anomalías metabólicas. Los resultados de la investigación se publican en la revista Archives of Dermatology.

Según los autores, existen informes sobre asociaciones entre psoriasis, obesidad, hipertensión, enfermedades cardiovasculares, diabetes mellitus y síndrome metabólico. Los investigadores creen que existe un vínculo entre la obesidad de la psoriasis y las enfermedades cardiovasculares, incluyendo a la diabetes, el ictus, la enfermedad cardiaca, la hipertensión y el infarto de miocardio.


Los autores de la investigación, dirigidos por Yi-Ju Chen, estudiaron a 77 pacientes con psoriasis y a 81 individuos que tenían la misma edad y sexo pero que no padecían la enfermedad. En 2006 y 2007, los investigadores recopilaron las características clínicas de los participantes, incluyendo edad, sexo, peso, talla y otras enfermedades, así como la gravedad de la psoriasis.

Además, los científicos analizaron muestras de sangre en relación a los niveles de leptina, que controla el consumo de alimentos, el peso corporal y las reservas de grasa y que también está asociada a procesos inmunes e inflamatorios.

Los individuos con psoriasis eran más propensos que los controles a estar obesos y a tener hipertensión y niveles elevados de azúcar en sangre o diabetes. Los niveles elevados de leptina se descubrieron con más frecuencia en las mujeres, los participantes con obesidad y aquellos con hipertensión, síndrome metabólico o psoriasis.

La psoriasis se asoció con los niveles elevados de leptina después de tener en consideración aspectos como el sexo, el índice de masa corporal y los factores de riesgo cardiovascular tradicionales. Además, estos mayores niveles de la hormona en los casos de psoriasis se asociaban con un mayor riesgo de desarrollar síndrome metabólico. Los descubrimientos vinculan así la inflamación crónica de la psoriasis con las alteraciones metabólicas.

Los investigadores señalan que los niveles de leptina altos en pacientes con psoriasis pueden derivar no sólo de los tejidos grasos sino también de la inflamación. Los autores apuntan a la conveniencia de incluir en el tratamiento general de la psoriasis la pérdida de peso en aquellos con obesidad.

lunes, 19 de septiembre de 2011

La psoriasis y los efectos psicológicos en la persona

La psoriasis que es una enfermedad inflamatoria de la piel, produciendo lesiones escamosas engrosadas e inflamadas, con una amplia variabilidad clínica y evolutiva, produce muchos efectos psicológicos en la persona que la padece.
De los tipos de psoriasis que existen, sólo la de origen genético tienen una causa clara. La enfermedad puede estar en el organismo toda la vida sin manifestarse, pero ante situaciones de estrés importantes, consumo de alcohol o abuso de antiinflamatorios, puede desencadenarse.
En general afecta entre un 2 a un 3 % de la población.
En Chile (población de 16.970.265 de habitantes), existe medio millón de personas que conviven con esta enfermedad. La doctora Rosalía Coelho, académica de la Facultad de Medicina de la universidad Andrés Bello (Chile), subraya que esta patología cutánea, además causa una conmoción en la vida social de quienes la padecen: “Los pacientes se sienten excluidos, ya que muchas veces los demás desconocen la enfermedad y evitan entrar en contacto físico con ellos por las lesiones que presentan”.
En una de las clínicas privadas más prestigiosas de Chile, la Clínica Alemana, hablan de la psoriasis como una enfermedad que daña el cuerpo y la mente.
El estrés y la tensión emocional facilita la aparición o recrudecimiento de la psoriasis en personas vulnerables. También los síntomas de la enfermedad generan estrés y lo colocan al paciente más nervioso, por lo que se puede hablar de un círculo vicioso. Los paciente se sienten como si estuvieran en un estado de incomodidad permanente, dado que le es más difícil tener una vida normal. El doctor Alejandro Koppmann, jefe de la Unidad de Psiquiatría de la Clínica Alemana, explica que "como con cualquier enfermedad crónica, el impacto emocional depende de diversos factores como, por ejemplo, si comienza en la infancia o adolescencia las personas pueden afectarse más, pues cuentan con menos elementos psicológicos para hacerle frente".

El psiquiatra agrega que el impacto es mayor si existe poco soporte o apoyo familiar y social. También si hay una historia de estigmatización o trauma escolar por la enfermedad o por sus tratamientos, que pueden afectar físicamente, como el uso de los corticoides que hacen engordar o las cicatrices que pueden modificar la apariencia de una persona. "Si no se cuenta con apoyo psicológico o hay demora en la consulta, el pronóstico también puede empeorar".

 Lo anteriormente señalado es muy esencial, ya que se dice que las consecuencias psicológicas son tan importantes como las lesiones físicas. El 40% de los afectados considera que no volverían a ser los mismos aunque se curaran, debido a las repercusiones que tiene en su vida personal y laboral. Por lo tanto no se trata solo de un problema estético, sino de un mal que traspasa muchos ámbitos de la vida del paciente, pudiendo afectar tanto en lo social como en lo laboral.

 Las repercusiones sociales y laborales se explican, porque la psoriasis es una enfermedad inmunológica en la que se desarrollan lesiones en la piel debidas a una renovación acelerada de sus células. En lugar de cada 28 días, se renuevan cada tres o cuatro. Las lesiones pican y duelen y, en ocasiones, terminan por agrietarse y sangrar. Aunque en muchas personas se concentran en zonas poco visibles, es una patología caracterizada por disminuir el autoestima y ocasionarle al paciente problemas en su ambiente más cercano y en sus relaciones interpersonales, incluso en los lugares de trabajo. Eso lo demuestra un estudio avalado por la Federación Internacional de Asociaciones de Pacientes con Psoriasis, donde se plantea que uno de cada cuatro afectados asegura que ha sufrido discriminación laboral alguna vez.


Otra especialista en el tema, María Dolores Sánchez Aguilar, presidenta de la sección gallega de la Academia Española de Dermatología concuerda también que las secuelas a nivel psicológico pueden ser graves, porque, aunque la persona tenga pocas lesiones, si están en la cara o en los brazos son muy visibles. Muchas personas con psoriasis se sienten rechazadas por los demás".

Por los problemas anteriormente señalados, muchas personas limitan su vida laboral y social. El citado estudio apunta que si la enfermedad se diagnostica  antes de los 24 años, las secuelas emocionales y los problemas académicos y en el trabajo pueden ser más graves, ya que muchas veces los pacientes se tienen que ausentar por mucho tiempo de sus actividades laborales o quehaceres diarios.
Hoy en día, los dermatólogos trabajan en colaboración con psiquiatras y psicólogos para tratar las repercusiones de la enfermedad.

En conclusión, se puede decir, que es importante que las personas que no padecen esta enfermedad, puedan tener acceso a una información adecuada y conocer de que se trata, para evitar la discriminación por causa del desconocimiento.
Por otro lado es importante que el paciente que padece esta enfermedad logre modificar su estilo de vida, incorporando estrategias de resolución de problemas y una mejor expresión emocional en forma oportuna, de manera que pueda dar a conocer los sentimientos (rabia, pena, alegría) con la emoción adecuada y no por medio de un síntoma físico. Esto se puede lograr de una forma muy positiva a través de una psicoterapia de apoyo de origen cognitivo conductual.

Autora:

jueves, 15 de septiembre de 2011

Descubren un nuevo tipo de célula (TH-22) inmune a la psoriasis.

Julio 2009.

Investigadores del Instituto de Investigación en Biomedicina de Bellinzona (Suiza) y la empresa Genentech de San Francisco del Sur (Estados Unidos) han descubierto un nuevo tipo de célula inmune dedicada a combatir las infecciones de la piel. Sus trabajos, realizados de forma independiente, se publican en la edición digital de la revista Nature Immunology.

Según los autores, los resultados de sus trabajos podrían ser útiles en el desarrollo de tratamientos para trastornos de la piel como la psoriasis y la dermatitis atópica.

Los investigadores han descubierto que las células especializadas, conocidas como células TH-22, liberan un mediador químico llamado interleuquina 22 (IL-22) que ha sido vinculado a la inflamación de la piel y la curación de heridas.

Los científicos, dirigidos por Federica Sallusto desde Suiza y Hergen Spits desde Estados Unidos, muestran que estas células TH-22 expresan los receptores CCR6, CCR4 y CCR10 que dirigen a las células a la piel.

El equipo de Sallusto también muestra que las células TH-22 son generadas por una células inmunes llamadas células plasmacitoides a través de la liberación de mediadores químicos llamados IL-6 y grupos de ciertas moléculas de señalización.

Ambos grupos de investigadores sugieren un ciclo malicioso que surge si estas células TH-22 se mantienen activadas y que podría contribuir a enfermedades de la piel como la psoriasis y la dermatitis atópica.

Identifican dos genes /LCE3B y LCE3C) responsables de la psoriasis.

Enero 2009.

Investigadores del Centro de Regulación Genómica (CRG) de Barcelona (España)  han identificado dos genes cuya ausencia implica más de un 20% de riesgo de sufrir psoriasis, y que son el segundo factor genético implicado en el desarrollo de esta enfermedad.

Para este trabajo, publicado en la revista Nature Genetics, se han estudiado más de 2.500 muestras de pacientes de España, Holanda, Italia y Estados Unidos, a los que se han explorado regiones del genoma que varían en el número de copia de los genes que contienen, conocidos como CNV (del inglés copy number variants), según ha explicado un portavoz del CRG.

La investigación determina que a los pacientes con psoriasis les faltan, con una alta frecuencia, las dos copias de dos genes conocidos como LCE3B y LCE3C, que tienen un papel muy importante en la formación de una epidermis funcional.

La psoriasis es una enfermedad inflamatoria y crónica de la piel que afecta a más de un millón de personas en España y que suele aparecer entre los 15 y 40 años, y que se debe a una combinación de factores ambientales y genéticos. El trabajo tiene implicaciones inmediatas para el diagnóstico y abre nuevas vías para explorar tratamientos preventivos y curativos de una enfermedad para la que las herramientas terapéuticas son sólo paliativas.

En la psoriasis se produce una proliferación y un crecimiento excesivo de las células de la piel, debido a alteraciones en la epidermis, y en concreto de los queratinocitos, y entre las alteraciones que se han descrito en esta enfermedad existe una reacción anómala de las células del sistema inmunitario. Algunos medicamentos, infecciones, traumatismos, el frío y el estrés son los principales detonantes de esta enfermedad de la piel, que se caracteriza por la presencia de lesiones, más o menos extensas, pero que también puede afectar a las articulaciones.

Según las misma fuentes, se sabe que la psoriasis es más frecuente entre gemelos idénticos y que hay familias en las que es común, pero a pesar de que se han identificado algunos factores genéticos implicados en la predisposición a la psoriasis, como el sistema mayor de histocompatibilidad o HLA, son pocos los factores comunes a múltiples poblaciones, seguramente por los distintos ambientes.

La investigación ha demostrado que el LCE3B y el LCE3C, que forman parte de una organización compleja de genes en el cromosoma 1 humano (Complejo Génico de Diferenciación Epidérmica), se expresan en la piel lesionada de los enfermos de psoriasis, señalando una regulación anómala en la expresión de las proteínas que tienen un papel clave durante el proceso de crecimiento de la epidermis.

La publicación de este investigación, dirigida por Xavier Estivill, coordinador del Programa Genes y Enfermedad del CRG, se acompaña de otros dos trabajos, uno de las cuales señala que los genes que están ausentes en las poblaciones de origen europeo del estudio del CRG pueden tener un efecto protector en la población china, en la que la psoriasis es muy poco frecuente. Los investigadores están estudiando ahora otros procesos en los que las alteraciones de la barrera de entrada de microorganismos y otros agentes pueden dañar la piel y otros tejidos, y en los que estos genes pueden tener un papel protector.

Artículo extraido de: http://www.elconfidencial.com/cache/2009/01/27/salud_40_espanoles_identifican_genes_responsables_psoriasis.html

lunes, 12 de septiembre de 2011

Identifican un gen (PSORS1) que predispone a la psoriasis.

Marzo 2006.

Localizado entre los gens que controlan la respuesta del sistema inmunológico, el descubrimiento puede llevar a encontrar tratamientos para combatir la psoriasis que son más seguros y efectivos.

ANN ARBOR, Michigan—Científicos en la Universidad de Michigan, U de M, encontraron una variación genética común en un gen del sistema inmunológico que hace mucho más probable el desarrollo de la soriasis— una enfermedad inflamatoria a la piel que puede desfigurar al afectado.

El gen, que recibió el nombre de PSORS1, debido a la predisposición a la psoriasis 1, es el primer determinante genético de psoriasis que ha sido identificado definitivamente en un estudio clínico de grandes dimensiones. Su descubrimiento, podría llevar a nuevos tratamientos más efectivos para combatir la enfermedad, sin los riesgos y efectos secundarios de terapias actuales.

El papel del gen en las causas de la psoriasis fue demostrado en un estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad de Michigan en el que participaron 2,723 personas de 678 familias en las que a lo menos un miembro tenía la enfermedad.

Los resultados del estudio de la U de M—el análisis más completo sobre el gen de la psoriasis hasta la fecha—será publicado en la edición de Mayo 2006 del American Journal of Human Genetics.

La psoriasis es una enfermedad que afecta a un 2 por ciento de la población estadounidense. Las personas que padecen psoriasis desarrollan manchas gruesas, blancas y escamosas en la piel y su cuero cabelludo. La enfermedad puede llegar a desfigurar y tiene efectos negativos en la calidad de vida. Alrededor de un 25 por ciento de las personas que padecen de psoriasis desarrollan finalmente artritis psoriásica, una condición que puede ser severa.

Psoriasis es una enfermedad multifactorial, distinta a otras causadas por la mutación sólo en un gen. Esto quiere decir que las personas afectadas deben heredar varios gens relacionados con la enfermedad, además de estar expuestos a uno o más precursores medioambientales, para llegar a desarrollarla.

"Por cada persona con psoriasis que tiene el gen PSORS1, hay otras 10 personas con el gen que no contraen psoriasis" dice el director del estudio James T. Elder, profesor de dermatología y de oncología radiológica en la Escuela de Medicina de la Universidad de Michigan y en el Sistema de Salud de Asuntos para Veteranos de la ciudad de Ann Arbor.

"Es como si usted deslizara un carro de compras a través del pasillo de un supermercado y fuera colocando gens en el carro" añade Elder. "En los mostradores, hay distintas marcas para cada gen, y uno de ellos es malo para usted. Si usted elige suficientes gens malos, entonces se enferma"
"Pero incluso si usted adquiere todos los gens malos, aún necesita un precursor del medio ambiente para contraer la enfermedad", explica Elder. "En la psoriasis, el estreptococo es un precursor inicial muy común. Activa el sistema inmunológico para atacar la bacteria. Pero una vez que la infección de estreptococos ha sido eliminada, el sistema inmunológico comienza a atacar a las células cutáneas del propio afectado", añade.
"La mitad de las veces, la psoriasis inducida por estreptococos es eliminada y no vuelve más. Pero para el otro 50 por ciento de la gente joven que la contrae, la psoriasis progresa para convertirse en una enfermedad crónica que dura toda la vida" advierte Elder.

El Gene PSORS1 es uno entre 20 variedades distintas (los científicos la llaman alelos) de un gen que se llama HLA—C. "En términos de la analogía con el supermercado, imagínese que el PSORS1 es una de las 20 marcas del HLA—C disponible en los mostradores,", dice Elder.

Ubicado en el Cromosoma humano 6, el gen HLA—C es uno de varios gens en el complejo de histocompatibilidad (MHC) que regula la manera en que el sistema inmunológico combate la infección. Los gens MHC llevan el ADN—con instrucciones para las proteínas cuyo trabajo es distinguir entre lo que pertenece al organismo y lo que no.

"Hay una gran variedad de variación genética en el MHC, porque está en las primeras filas enfrentando a los patógenos y cáncer", explica Elder. "Es un área en que es positivo ser diferente. Si todos fueran iguales, seríamos como maíz híbrido. Podría venir una plaga y exterminarnos a todos".

Científicos han buscado a los gens relacionados con la psoriasis durante 30 años, pero hasta ahora los estudios habían sido no concluyentes, según Rajan P. Nair, Ph.D., el primer autor del estudio y profesor adjunto de investigación en dermatología.

"Investigadores han identificado a 19 áreas en cromosomas, que podrían estar genéticamente relacionadas con la psoriasis", dice Nair. "Numerosos estudios han confirmado una relación fuerte con MHC, pero ninguno había podido determinar cuál gen en el MHC estaba relacionado con la psoriasis".

En un estudio anterior, Nair y sus colegas de la Universidad de Michigan limitaron la búsqueda del gen PSORS1 a 300,000 segmentos del cromosoma 6, que incluía el HLA—C y a lo menos otros 10 gens.

Para determinar cual de los gens estaba relacionado con la psoriasis, utilizaron una técnica llamada mapeo de haplotipos. Los Haplotipos son grupos o racimos de alelos, que en genral, se heredan juntos, porque están ubicados en el mismo cromosoma muy cerca el uno del otro. Esto quiere decir que pequeñas variaciones en el ADN que se originaron en un antecesor distante, son a menudo trasmitidas de manera intacta de genración en genración. Si un haplotipo contiene cambios genéticos que predisponen más a la enfermedad, los científicos pueden encontrarlo comparando secuencias de ADN en los haplotipos de personas con la enfermedad con los de personas que no la padecen.

Investigadores de la U de M realizaron primero la secuencia y compararon el ADN en 300,000 segmentos de 10 cromosomas MHC de cinco personas que participaban en el estudio. Un análisis detallado de estas 10 secuencias de ADN reveló diferencias que estaban presentes solo en los cromosomas de psoriasis, pero nunca en cromosomas normales. Análisis posteriores limitaron la búsqueda a un solo gen, el HLA—C, y un alelo específico que provoca la enfermedad, el HLA—Cw6.

Los medicamentos utilizados para tratar la psoriasis son también utilizados para tratar otras enfermedades auto inmunes, como el lupus y la artritis reumatoide. Estos medicamentos apagan el sistema inmunológico, que deja al organismo vulnerable a contraer infecciones. Ahora que los científicos de la U de M han identificado el HLA—Cw6 como el gen PSORS1, Elder dice que los pueden concentrarse en buscar las maneras de bloquear su habilidad de atarse a antígenos en la superficie de la célula, lo que puede llevar a tratamientos más seguros para tratar la psoriasis.

"Lo que todos estamos buscando es tratar de encontrar cuales son las ramas del sistema inmunológico responsables de precursar la psoriasis, para no tener que apagar a todo el sistema inmune– y hacerlo sólo en las partes que son importantes" dice Elder.

Mientras Elder cree que el PSORS1 es el gen principal relacionado en la predisposición a la psoriasis, el advierte que no es el único y que es necesaria investigación adicional para encontrar a los otros gens relacionados en esta enfermedad compleja y misteriosa.

"El acceso a un grupo grande y diverso de sujetos de estudio es crucial para el éxito de este tipo de investigación clínica", dice Elder. "Estamos agradecidos a las 5,000 personas que han participado en el estudio sobre psoriasis hasta ahora. Ha sido un esfuerzo colaborativo en el que han participado científicos y pacientes de departamentos de dermatología de muchas instituciones— incluidas la U de M, la Universidad de Kiel en Alemania, el Hospital Henry Ford en Detroit y el Sistema de Salud de la Oficina de Asuntos de veteranos en Ann Arbor."

El estudio fue financiado por el National Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Músculo esqueléticas y de la Piel, la Fundación Dudley y Dawn Holmes, La Fundación Nacional de Psoriasis y el Centro Nacional para Recursos de Investigación—
Otros colaboradores en el estudio de la U de M incluyen a Philip E. Stuart, investigador asociado; Ioana Nistor, Ravi Hiremagalore, y Nicholas Chia.; Goncalo R. Abecasis, D. Phil., profesor asociado de bioestadísticas y John J. Voorhees, Profesor de dermatología .

Referencia American Journal of Human Genetics, May 2006 (en prensa).

NOTA: El estudio ha sido publicado electrónicamente en la edición pre impresión de la revista en el sitio de Internet del American Journal of Human Genetics www.journals.uchicago.edu/AJHG/journal/preprints.epl.
El sitio es asequible sólo a suscriptores de la revista. Si no tiene una suscripción contacte a Sally Pobojewski para recibir una copia del estudio.

Descubren un disparador molecular (FAS) para la psoriasis.

Enero 2006.


Una molécula inmune que normalmente ayuda al “suicidio” celular, puede ser un disparador importante en el desarrollo de la enfermedad dermatológica frecuente conocida como psoriasis, según científicos del Instituto de Tecnología- Tejnión de Israel.y la Universidad Estatal de Nueva York, Stony Brook.
Una molécula inmune que normalmente ayuda al “suicidio” celular, puede ser un disparador importante en el desarrollo de la enfermedad dermatológica frecuente conocida como psoriasis, según científicos del Instituto de Tecnología- Tejnión de Israel.y la Universidad Estatal de Nueva York, Stony Brook.
Según la Fundación Nacional para la Psoriasis de los Estados Unidos, entre el uno y el tres por ciento de la población mundial sufre de psoriasis. Alrededor del treinta por ciento de los pacientes con psoriasis son casos graves en los que la piel afectada cubre más del tres por ciento de su cuerpo. En algunas personas, la enfermedad está asociada con una forma de artritis.

La culpable, una molécula llamada Fas, actúa como intermediario entre las células inmunes activadas y un puñado de hormonas inflamatorias involucradas en explosiones de psoriasis, dicen el Dr. Amos Gilhar y sus colegas investigadores del Tejnión. El estudio aparece en la edición de enero del American Journal of Pathology.
La psoriasis es una enfermedad de la piel no contagiosa y de por vida, que aparece usualmente en forma de parches escamosos e inflamados de la piel, aunque puede tomar varias formas diferentes. En pacientes con psoriasis, los glóbulos blancos de la sangre que se encargan del sistema de defensa inmunológico del cuerpo, son sobre exigidos y desencadenan otras respuestas inmunológicas que acumulan células de la piel en una cantidad anormal.

Los tratamientos actuales para la psoriasis, tales como la droga Enbrel, se centran en estas hormonas inflamatorias, pero los investigadores pudieron detener el desarrollo de la psoriasis en ratones mucho antes que estas hormonas entraran en juego inyectando un anticuerpo Fas-bloqueante.

“El descubrimiento de anticuerpos para la Fas puede prevenir la psoriasis muestra además la complejidad de la enfermedad y sus numerosos recorridos moleculares”, dice Gilhar.

La Doctora Alice Gottlieb, jefa del Centro de Investigación Clínica de la Escuela de Medicina Robert Wood Johnson, de Nueva Jersey, concuerda. “Esta investigación demuestra que la activación del recorrido de la Fas es importante para comenzar a hacer rodar la pelota en la psoriasis”, comenta Gottlieb (quien no estuvo involucrada en este estudio). “Estos hallazgos podrían tener implicaciones para otras enfermedades inmunológicas tales como la artritis reumatoide y la enfermedad de Crohn”.

Los investigadores sospecharon que la molécula Fas estaba en el medio de este proceso ya que se encuentra en altos niveles en pieles psoriásicas y lleva a una doble vida intrigante. La mayoría del tiempo, la Fas guía el proceso normal del suicidio celular llamado apoptosis. Pero en las células donde la apoptosis está bloqueada por otras moléculas, como en las célulad de la psoriasis, Fas cambia de rol y en cambio impulsa la producción de hormonas comunes inflamatorias.

Para entender exactamente el lugar en que se ubica la Fas en el desarrollo de la psoriasis, Gilhar y sus colegas injertaron en ratones trozos de piel limpia no involucrada de pacientes humanos con psoriasis. Inyectaron a los ratones glóbulos blancos conteniendo la molécula de Fas en sus superficies para provocar la formación de lesiones de psoriasis en la piel.

Bloqueando la acción de la Fas con un anticuerpo especial, los investigadores pudieron demostrar que en realidad la Fas es un intermediario clave en la formación de la psoriasis. Sin la Fas, el matador natural de las células era incapaz de desencadenar la producción de hormonas inflamatorias que producen el engrosamiento característico de la piel y otros signos de psoriasis.

Existe alguna evidencia de que la Fas está involucrada en otras enfermedades de la piel tales como el eczema, de modo que futuros tratamientos que apuntan al recorrido de la Fas podrían demostrar ser útiles para una variedad de enfermedades, sugiere el Dr. Richard Cáliz, colaborador de Gilhar de la Universidad Estatal de Nueva York Stony Brook. Sin embargo, los investigadores necesitan desarrollar un anticuerpo humano para la Fas antes de que la técnica pueda ser probada en personas.

“El presente estudio es uno de los muchos y maravillosos trabajos que han surgido de esta tan productiva colaboración a través de tantas millas entre el Dr. Gilhar y el Dr. Cáliz”, dice Gottlieb.

Fuente: Israel21c.com

jueves, 8 de septiembre de 2011

MundoPsoriasis recibe la acreditación WIS

El Comite Evaluador de PortalesMedicos.com ha concedido la acreditacion WIS (Web de Interes Sanitario) al blog Mundo Psoriasis
 

La concesion de este sello conlleva la creacion de una pagina web incluida en PortalesMedicos.com, que certifica la acreditacion obtenida y en la que se recoge mas informacion sobre la web, para un mayor conocimiento de la misma entre los visitantes de PortalesMedicos.com.


Autor: Juan Carlos Delgado